Hoy os quiero hablar de un aparatito que lleva media vida en mi baño y que hace súper poco renové: la Silk-épil. Mi primera depiladora no fue la Silk-épil y tengo que decir que dolía un montón y una amiga del instituto (hace años ya) me decía que la Silk-épil no dolía nada así que le lloré a mamá hasta que me la compró (no sé qué haría sin mamá :)). Y sí, dolía muchísimo menos, de hecho aún funciona correctamente mi Silk-épil con unos 10 añitos a sus espaldas, pero Braun gracias a su Club de Embajadoras Próxima a ti me regaló una nueva Silk-épil que ¡me ha enamorado!

Antes de hablaros de la Silk-épil y sus maravillas quiero contaros un poco mi tipo de piel y de vello. Mis pobres piernas son súper-secas y además hace poco me diagnosticaron urticaria nerviosa con lo que podéis deducir que son ultrasensibles. Siempre me he depilado o con la Silk-épil o con cera (en algún momento he echado mano a cuchillas y crema, pero pocas veces), con lo que tengo poco vello y además es muy muy débil, tanto que usando cera fría en casa a veces, al tirar, me he quedado con la banda en la mano sin un sólo pelo porqué al ser tan finos ¡no salen! :(

Suelo depilarme en centros de estética y usar la Silk-épil para retoques en casa y así espaciar más mis visitas al centro de estética. Menos en las axilas que SIEMPRE uso la Silk-épil. Pero últimamente tenía el problema que me salían granitos y puntitos (odiosos) al depilarme con la depiladora y estaba usándola menos.

Ahora que ya tenéis los antecedentes os cuento sobre la nueva Silk-épil:

Silk-épil 7 Skin Spa

Ya os he comentado que ha sido un regalazo de Braun gracias a su programa de Embajadoras Próxima a ti, así que ya estáis corriendo a apuntaros porqué van abriendo proyectos para probar productos ;)

Hoy sólo os hablaré de la depiladora con su cabezal para la exfoliación, pero en el regalo venían más cosas :) (Os las iré enseñando todas).

Primero de todo, lo que me ha enamorado sólo con abrir el pack ha sido que ¡va sin cables! Al fin puedo alejarme de un enchufe para depilarme tranquilamente :) Parece una tontería, pero en casa de mis padres el enchufe del baño estaba ubicado lejos de cualquier opción de sentarme… tenía que hacer verdaderas posturas que parecían salidas de El Cirque du Soleil.

En comparación con la anterior Silk-épil con esta ¡no siento NADA de dolor! Con la otra sentía ligeras molestias, pero con esta gracias a sus rodillos masajeadores no noto nada de nada, pero los pelos los quita ;) También tener en cuenta que yo tengo realmente cuatro pelos mal contados (bendita genética) y por lo tanto supongo que personas con más vello sufrirán un poquito, pero ha mejorado muchísimo la sensación de depilarse.

Además está pensada para que podamos usarla en la ducha o en la bañera, con lo que gracias al efecto dilatador del agua caliente, dolería aún menos. Yo en la ducha no la he usado para depilar ya que si me quito las gafas no voy a ver ni un sólo pelo (maldita genética…). Fuera de la ducha agradezco muchísimo la luz para que no se nos escape ningún pelo, que con lo finitos que son los míos siempre se escapaba alguno.

Referente a los granitos y pelos enquistados que SIEMPRE me salían… las primeras veces me salieron :( pero después leí las recomendaciones de uso que venían con el pack que me regaló Braun y recomendaban usar el cabezal exfoliante, que no había probado por la urticaria nerviosa… Ahora bajo la ducha utilizo cada 2-3 días el cabezal exfoliante el piernas y brazos y con esto ya he conseguido que no se me salgan granitos, ni esos puntos tan antiestéticos ni los pelos enquistados :D

Sobretodo, después de la depilación o de la exfoliación ¡usar una hidratante! Realmente deberíamos hacerlo cada día, pero esos días se hace aún más importante.

La Silk-épil 7 Skin Spa Premium edition, que es la que me regaló Braun, tiene un precio recomendado de 199€. ¿Caro? Pues, teniendo en cuenta que la otra Silk-épil que tuve sigue funcionando y han pasado 10 años… no, no lo considero caro. Lo considero una inversión.

Más información en la página oficial de Braun

¿Os animáis?