No, no solo de Lush vive mi ducha. Hay algunas otras marcas invitadas y entre ellas está The Body Shop con su gel de ducha de Karité.

Este no es un gel adecuado para todo el mundo, pero para mi piel es casi perfecto. Suelo combinarlo con Dreamwash que ya sabéis que me tiene enamoradita, pero creo que es bueno ver más opciones.

Gel de ducha de Karité de The Body Shop

El gel de ducha de Karité de The Body Shop es un jabón súper cremoso que hace una espuma casi nula. Así que no es adecuado para ti si, como yo antes, te encanta ducharte con toneladas de espuma.

Por cierto, aprovecho para deciros que si vuestra piel es sensible deshaceros de la espuma es la mejor decisión que podéis tomar para vuestra piel. Lleva una fase de adaptación esto de lavarse sin espuma porque al principio tienes la sensación que si no hace espuma, no limpia. Una vez lo superas, te das cuenta que tu piel es más feliz, pica menos, se enrojece menos y se deshidratada menos!

El gel de ducha de Karité de The Body Shop es ideal para empezar la fase «sin espuma» porque hace la mínima. Así que no sientes que te estás lavando sin jabón pero ya vas reduciendo el nivel de espuma de tus duchas.

Gracias al Karité, es un gel de ducha bastante hidratante aunque (obviamente) no exime de ponernos nuestra hidratante a posteriori. La textura es muy cremosa y no se escurre entre los dedos.

En cuanto al olor, es muy suave y me huele básicamente a limpio. Ideal para un gel de ducha neutro.

Y si os gusta el karité podéis complementarlo con otros productos de la misma línea de karité como el exfoliante o la manteca (esta última estará cuando consiga hacer un post de productos acabados…)